Los
compañeros del deber, también llamados el compañonazgo, son una curiosa agrupación
que sigue vigente en el siglo XXI y es bastante desconocida a la par
de interesante.
Como
todos sabemos, en las cofradías de trabajadores de las grandes obras
de la edad media se gesto un sistema iniciático que posteriormente
dio lugar a la masonería, sin
embargo, nadie nos cuenta que pasó con los trabajadores de esas
obras magnificas, ¿desaparecieron?, no, no lo hicieron, siguieron
trabajando y construyendo normalmente, por algo eran trabajadores y
tenían que ganarse la vida.
Estos
trabajadores, herederos de la asociación obrera de los auténticos
constructores, y conocedores de su saber iniciático, mantuvieron el
sistema filosofico y el sistema de aprendizaje del oficio, su saber
les hizo trabajadores consumados y considerados, desplazándose de
obra en obra, manteniendo un carácter libre de señoríos,
Portaban
pendientes de oro en el lóbulo de la oreja como señal de su
libertad.
![]() |
Sello de una agrupación de Compagnons, notese su semejanza con la masonería |
Mantuvieron
su sistema de Aprendices, normalmente jovenes de 15 o 16 años,
Aspirantes cuando los aprendices ya habian demostrado su valía y
Compañero que es quien, no solo sabe trabajar, si no que ha
completado un viaje de Maestro en Maestro para aprender técnicas de
conocimiento, llamado “Tour de Francia” (y que inspira la famosa
vuelta ciclista), y logra hacer una obra excepcional, una obra
maestra.
No
pensemos que pasar de Aprendiz a Aspirante es cosa fácil, no solo
tienen que demostrar su saber con un trabajo al que llaman “maqueta
de adopción” como prueba, sino que se valora su relación con la
ciudad donde se vive, el sentido humanista, así como el
comportamiento de cada día.
Un
Aspirante, puede lanzarse a hacer el llamado Tour de France, que puede durar
varios años, con el objetivo de aprender saberes indispensables para
realizar su oficio, buscando maestros que le enseñen conocimientos
para llegar a una perfección en su trabajo, del conocimiento de los materiales y de
las técnicas a aplicar. Solo los mejores serán futuros compañeros del deber.
Un
compañero del deber, puede, según la leyenda del Maestro Jacques
(referencia a Jacques de Molay el ultimo Gran Maestre templario) y
las leyendas del Rey Salomón sobre la construcción del templo, acceder a los Enfants de Maître Jacques y a los Enfants du
Père Soubise, ordenes iniciáticas de las que casi nadie puede
llegar a saber, siquiera de su existencia.
Todos
los pasos de un nivel a otro están coronados por un rito iniciático.
Su
lema es: “SERVIR SANS S'ASSERVIR NI SE SERVIR” (Servir sin
someterse ni servirse)
No hay comentarios:
Publicar un comentario